Se Arriesgó A Ir A La Cárcel Por Salvar A Un Osezno Moribundo Que Encontró De Excursión

El fotógrafo Corey Hancock estaba de excursión por Oregón cuando vio algo que resultó ser un osezno al borde la muerte. Hancock escribió que el oso estaba “tumbado de espaldas, aparentemente muerto. Tenía los labios azules y los ojos abiertos pero nublados e inmóviles. Llovía mucho y se estaba empapando. Me pareció verlo intentar respirar”.

“Pensé en mi propio hijo aún bebé en casa. El oso parecía ser una cría también. ¿Iba a quedarme ahí y verlo morir en la lluvia? No… Tenía que hacer algo.”

Así que cogió al oso y salió corriendo hacia su automóvil. “Durante todo el rato, estaba seguro que de una furiosa madre osa vendría a por mi.”

Cuando llegó al auto, el osezno dejó de respirar. Hancock le hizo respiración boca a boca y el animal volvió a respirar nuevamente. El rescatador lo llevó al veterinario, donde se va fortaleciendo cada día tras ser tratado por deshidratación severa y desnutrición.

Sin embargo según el departamento de Fauna y Pesca de Oregón, Hancock debería haber sido multad con 6000$ por su ayuda al oso. O incluso peor, debería haber sido penado con un año de cárcel. Afortunadamente no habrá castigo para este amable hombre.