No Pensaba Perderlo: Se Bebe Coñac De $200 Dólares Antes De Que Se Lo Confisquen En Aeropuerto

Si crees que tú harías lo mismo, te contamos que después no pudo tomar su vuelo por estar en evidente estado de ebriedad, pero para ella parece que eso no tiene tanta importancia.

Las restricciones en los aeropuertos para llevar regalos o productos de un país a otro son bastantes, por lo que los que viajamos de vez en cuando, optamos por hacer todas las averiguaciones pertinentes para no perder dinero debido a esto.

Que te quiten algo en el aeropuerto es una situación que nadie quiere vivir, sobre todo si eso significa además, el retraso para llegar a un lugar de destino.

La llamada “señorita Zhao” (única forma en la que se ha identificado a la mujer) trató de pasar una botella de coñac en su maleta de mano debido a que desconocía que eso no se podía hacer o que si lo sabía, pero de todas formas lo intentó.

Si nosotros hubiésemos estado en la situación de esta mujer probablemente habríamos buscado una forma para no perder la botella o para viajar con ella de todas maneras.

Al menos lo que recomiendan los aeropuertos tras incautar algún producto es lo siguiente:

  1. Llevar el artículo al mostrador de boletos y registrarlo en el equipaje o en una caja provista por el aeropuerto.
  2. Muchos aeropuertos utilizan un servicio postal o algún servicio de envío para comprar cajas, sellos y sobres para enviar a casa los artículos incautados.
  3. Si alguien te está viendo, puedes entregarle ese artículo que te prohiben llevar.
  4. Si tu automóvil está afuera, puedes llevarlo ahí de nuevo.

La señorita Zhao decidió tomar una determinación no muy usual: se bebió la botella de coñac que querían confiscarle.

O al menos lo intentó, porque no alcanzó a beberse la botella completa.

El coñac era un  Rémy Martin XO Excellence que cuesta unos $200 dólares, algo que duele que te confisquen, claramente. The Nanfang reporta que la señorita Zhao “se sentó en un rincón y se bebió toda la botella de coñac”.

Inicialmente podemos ver a la mujer que se bebió la botella de coñac como una heroína moderna, rebelde y decidida, pero tras esto lo que pasó es que la señorita Zhao no tardó en emborracharse pues no tuvo la capacidad de soportar tanto alcohol en su cuerpo.

Y al emborracharse comenzó a “actuar salvajemente y gritar” frases incoherentes por lo que la policía la detuvo y no pudo abordar su vuelo.

Las autoridades se comunicaron con su familia y permitieron que la mujer se fuese a casa cuando estuvo más sobria.

Esto nos deja una gran enseñanza: Antes de llevar cualquier cosa en tu maleta, infórmate de lo que si puedes y lo que no para que no tengas que pasar un mal rato o pases por una situación como la de la señorita Zhao.