Es tan entretenido salir a dar un paseo por el bosque, más aún si se pone atención a algunas de las formas de los árboles que son realmente extrañas y caprichosas. Muchos de aquellos árboles pueden tener cientos e incluso miles de años y no sabemos qué tipo de criaturas increíbles pueden albergar en su interior.
Lo que le sucedió a Shirley Zindler en los bosques del Condado de Sonoma en California es más o menos un gran hallazgo. Mientras caminaba con sus amigos tranquilamente, un sonido al interior de un árbol enorme llamó su atención. El grupo se acercó lleno de miedo y entonces apareció algo que jamás se imaginaron, al parecer algún ser humano había abandonado a un pequeño perro a su suerte en el bosque y éste estaba irritado y lleno de miedo dentro de un recodo del árbol. Para su frtuna, lograron rescatarlo y hoy el animal se encuentra bien. Shirley adoptó al perro y le bautizó Boo, viven juntos y se han hecho muy buenos amigos.
Él es el afortunado Boo:
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