Profesor Encuentra A Alumno Solo En El Salón Haciendo Su Tarea: En Su Casa No Hay Electricidad

Existen muchos niños y adolescentes que odian asistir al colegio, tanto así que a veces pasa a ser una etapa. Por ejemplo, no se quieren levantar temprano, ni hacer los deberes, ni escuchar al profesor. Pareciera ser que en esa etapa solo se busca la satisfacción personal y perder el tiempo. Quizás muchos de nosotros pasamos por algo así, pero en otros casos es diferente: hay quienes se esfuerzan todos los días para ir al colegio y aprender día a día.

Este último es el caso de Jeric Reyes, un estudiante filipino que con sus ganas de superarse ha emocionado a todo el mundo.  El joven es alumno de la Escuela Nacional Malusak, en la localidad de Quezón.  Es así donde se cultiva día a día, pero para sorpresa de uno de sus profesores, Jeric no se conforma con el horario que debe asistir al  colegio.

 

 

El profesor, Mark Pee Pornasdoro, estaba en el colegio revisando los salones de clases mientras se preparaban para la tormenta que había sido anunciada. En ese minuto, al llegar a uno de los salones, se sorprendió porque ya era tarde y las clases habían terminado hace horas, pero un alumno continuaba haciendo su tarea y era Jeric, precisamente.

Cuando él le preguntó qué hacía ahí, su respuesta lo emocionó, pues había elegido quedarse a hacer sus tareas escolares en el colegio, porque en su casa no tienen electricidad. El profesor, emocionado, también se preocupó ya que la hora de la cena había pasado y supuso que el esforzado niño tendría hambre.

“Dijo que comería más tarde. Como si el dolor del hambre fuera su amigo, como si tuviera que acostumbrarse al sufrimiento”, escribió Pornasdoro en su cuenta de Facebook. “Se queda sólo para estudiar, sólo para aprender. Es noble”, escribió el profesor.

Pornasdoro dijo que los estudiantes como Jeric hacen que su trabajo sea satisfactorio y le dan más energía para enfrentar los desafíos de enseñar. Eran las 20:00 horas cuando el esforzado estudiante terminó su tarea y se fue.

“Me hace llorar, pero mi alma está sonriendo”, dijo el profesor.

 

 

Como era de esperarse, la historia de Jeric de esfuerzo y superación ha emocionado a muchos usuarios y usuarias de las redes sociales, quienes han elogiado su actitud y ganas de salir adelante. Por lo que si eres uno de los que en este minuto odia el colegio o trabajo, es mejor que lo pienses dos veces y tengas en mente a este alumno que aprecia cada minuto.